SERIE: LA MÚSICA CRISTIANA HOY
1. El origen de la Música
Inicio de la serie: LA MÚSICA CRISTIANA HOY
1. EL ORIGEN DE LA MÚSICA
La música tiene un efecto sobre el ánimo humano: Música
clásica te calma, pero también hay ritmos, letras y subliminales
que te provoca a la nostalgia, los celos, el deseo, furia, etc.
Música es el arte de organizar sensible y lógicamente los sonidos
utilizando melodías, armonías y ritmos que involucra complejos
procesos psicoanímicos; tanto en quien(es) la interpreta(n) como
en los que la escuchan. El cuento del flautista mágico se vuelve
una realidad despiadada y cruel cuando comprobamos que
efectivamente la música tiene el poder de arrastrar a los hombres
con sus notas a hacer lo que los intérpretes quieren que hagamos.
La música provoca sentimientos, danza o baile, consumo; es un
excelente medio de manipulación. Introduce principios de
conducta en las personas (no siempre buenos); dice “bonito”
cosas crueles. Identifica al oyente con lo que el algo o el alguien
que está dentro de ella quieren que la música exprese.
Desde la prehistoria el hombre utilizó diversos objetos, incluso su voz, para producir música. Nos referimos a huesos, piedras, cañas y conchas para producir enigmáticos sonidos. Los usaban para dar una señal de alarma, de fiesta, para comunicar mensajes. La música es comunicación, educación (no siempre buena), manipulación, expresión.
De pronto surgieron en sumeria las primeras civilizaciones humanas; resulta incomprensible como de pronto el hombre deja los rudimentos de las cavernas y de ser un semi-animal para tener un conocimiento excelentísimo a acertadísimo acerca de la astronomía, la medicina y LA MÚSICA.
Todas las civilizaciones surgieron de sumeria (también conocida como Mesopotamia o Babillonia).
En la edad media la iglesia católica asesinó a Copérnico porque descubrió que la tierra era redonda y que giraba alrededor del sol, pero los sumerios ya plasmaban en tablas de arcilla el conocimiento que tenían del sistema solar. Para ellos la tierra era el 7º planeta; y los contaban desde la procedencia de un planeta hoy desconocido oficialmente a propósito, pero que en esas tablas de arcilla aparece como evidencia hoy ya demostrada de que en realidad el sistema solar es tal y como lo conocieron estas primeras civilizaciones.
A partir del sol la tierra es el 3er planeta; pero a partir del planeta deliberadamente ignorado la tierra es el 7º planeta.
Según los sumerios el universo existe en una armonía perfecta. Los planetas registran órbitas perfectamente definidas y predecibles. La armonía preserva la existencia del universo. Es por esta razón que las galaxias, las constelaciones y los planetas existen; porque existen fuerzas magnéticas y gravitacionales que las operan, en una perfecta armonía.
Hebreos 1
Dios ha hablado por su Hijo
1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas,
2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;
3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
4 hecho tanto superior a los ángeles, cuanto heredó más excelente nombre que ellos.
Lo que dice este capítulo trata acerca del universo del que estamos hablando y su relación con Jesucristo. Dice que en otro tiempo Dios habló a los padres (se refiere a nuestros ancestros) por el Hijo. Y que es precisamente el Hijo por quien hizo el universo, que el hijo es el heredero de todo.
Por Jesús, con Jesús y para Jesús Dios hizo el universo.
Pero luego en el v.3 se nos enseña una verdad muy importante: La armonía que existe en el universo es porque Jesucristo sustenta todas las cosas con la palabra de su poder.
Utiliza la palabra “sustenta”, y eso es exactamente lo que ocurre con el universo: Está flotando en una armonía asombrosa y perfecta. Ahí están las constelaciones, y las galaxias; se pueden hacer mapas. Ahí está el sistema solar. Todo flotando, todo moviéndose, todo sustentado milagrosamente, ahora sabemos por quién: Por Jesucristo.
Luego continúa el v.3 diciendo: “habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
Esto nos da la idea de que lo que está arriba no está arriba, sino que lo que está arriba simplemente flota y subsiste por complejas leyes gravitacionales, magnéticas y espirituales ordenadas por Jesucristo; pero la tierra es un minúsculo e insignificante planeta que también flota y es sustentado en esta magnífico sistema que es el universo sobre todo el cual está sentado Jesucristo en las verdaderas alturas.
De Jesucristo sabemos que se hizo hombre y que efectuó la purificación de nuestros pecados; pero no sabíamos mucho de estas cosas que hoy estamos aprendiendo acerca de su omnipotencia y omnisciencia.
4 hecho tanto superior a los ángeles, cuanto heredó más excelente nombre que ellos.
Ahora habla de otros seres celestiales, a los que se llama “ángeles”. El significado de esta palabra es muy amplio. Pero para efectos de lo hasta aquí expuesto, consideremos que se trata de seres celestiales (o sea que viven o provienen de algún lugar del universo) y que por alguna razón (tal y como lo hizo el propio Señor Jesús, pero Él para purificar nuestros pecados) vinieron a la tierra.
Ellos son la razón por la que de pronto el hombre pasó de ser cavernario a ser científico y racional.
Son ellos, los ángeles, los que trajeron al hombre el lenguaje, la escritura, el conocimiento de la agricultura, la ganadería, la medicina, la astronomía y la música. Hasta ahí todo parece bueno; pero también trajeron la astrología, la idolatría, la torre de Babel (la cual juzgó Dios); y se dispersaron los grupos humanos, pero continuaron obstinados en su rebeldía habitando en ciudades a modo de réplicas de su original torre de Babel, ciudades no construidas por ellos porque se trata de monumentos arquitectónicos aun demasiado complejos para nuestra ciencia moderna, que rendían culto y tributo a los astros y los llamaban dioses Júpiter, Saturno, Venus, Mercurio, Luna, Sol, etc. Zeus: dios del rayo. Tlaloc: dios de la lluvia. Huitzilupochtli: dios del sol, etc.
Fundaron religiones idolátricas que también fueron réplicas de la religión babilónica, basada en el culto a la diosa madre y su hijo en brazos.
Y lo que Hebreos 1.4 declara que Jesús es superior a todos esos ángeles que se invocan, en otro tiempo o en otras culturas se les llama con otro nombre, pero es el santo del amor, el de la fertilidad, el del trabajo, el del paisano, hasta el del narcotraficante, etc; pero que el nombre de Jesús es un nombre más excelente que el de todos ellos, y que no hay otro nombre en el cual los hombres podamos ser salvos.
La palabra clave de la sustentación es la armonía. La armonía es la razón por la que Dios nos dio sus leyes: Ama a Dios sobre todas las cosas, más que a tu padre, madre, hermanos o bienes. Ama a tu prójimo como a ti mismo. En estos 2 mandamientos se resume toda la ley y los profetas. En otro tiempo Dios hablo por medio de profetas, en estos tiempos recientes nos ha hablado por medio de su Hijo.
Ahora podemos lograr una comprensión más completa acerca de:
Jn 3.16 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
“El mundo” se refiere a nuestro minúsculo planeta, a cuyos habitantes Dios nos habló por medio de Su Hijo ¿Por qué? Porque nos amó y quiere que tengamos vida eterna. Pero no quiere que entremos en esa vida eterna con una mentalidad no armoniosa con Dios.
El espíritu del anticristo está tratando de infundir al amor al prójimo pero sin amor por Dios. Unidad entre los hombres, pero no con Dios. Y el mandamiento completo es amar a Dios sobre todo, y después al prójimo como a nosotros mismos.
En la parábola de los labradores malvados que mataron a los profetas y después al Hijo y dijeron “Ahora sí nosotros somos los dueños” Jesús nos describió exactamente como serían estos tiempos. Pero lo que Hebreos dice es que el Hijo resucitó y es el heredero de todo, y viene en juicio contra los labradores malvados.
De pronto el conocimiento musical pasó del simple uso de caracoles, piedras, cañas y huesos al uso de instrumentos de cuerdas y el dominio de las 7 notas musicales.
¿Dijimos 7? Sí.
El mundo (que Dios amó y al cuál le habló en estos más recientes tiempos por el Hijo) es el planeta número 7.
Los días que tiene nuestra semana ¡son 7!
¿Quién ordenó que fuera así? ¿Quién lo estableció? 6 días trabajó Dios y el 7º descansó
¿En dónde trabajó Dios 6 días y el 7º descansó? En el mundo ¿Por qué? Porque lo amó ¿Lo vemos? Dios estableció que la semana en el mundo durara 7 días.
Pero vinieron los ángeles (que en Gn 6 se nombran como “los hijos de Dios”, tan solo porque venían de los cuerpos celestes) y corrompieron a los hombres. Introduciendo la religión babilónica e incitándolos a construir y vivir en pirámides.
¿Quién enseñó a los hombres los nombres de los días de la semana? Ya dijimos que Dios estableció que la semana en el mundo durara 7 días, pero ¿por qué llamar al primer día de la semana “día del sol” (Sunday en inglés)?; porque “lunes”, haciendo referencia a la luna; “martes”.
Esos nombres existen desde Babilonia; son prueba de que todas las civilizaciones modernas provienen de ahí. Dios los juzgó y fueron dispersados; pero llevaron su rebelión y su falsa religión por todas las latitudes del planeta.
La armonía de la música, el uso de las notas; provienen de la armonía que existe en el universo.
Los primeros seres humanos que tuvieron acceso a la música fueron los sacerdotes; trátese de Sumeria o de Egipto. Lo que llama la atención es lo avanzado de dicho conocimiento; exactamente como con la astronomía. Si no tenían telescopios, ¿cómo sabían los sumerios que Plutón no era un planeta? Nuestra ciencia moderna durante muchos años creyó que Plutón era un planeta hasta que a mediados de los años 90 se descubrió que era solamente un gran asteroide girando alrededor del sistema solar. Pero en los albores de la humanidad alguien le enseñó a los sumerios que Plutón no era un planeta.
¿Cómo lo habrían llegado a saber ellos por sí mismos si no tenían potentes telescopios como ahora nosotros ni naves espaciales?
Para los sumerios el planeta de origen de era Nibiru; después Urano (2), Neptuno (3), Saturno (4), Júpiter (5), Marte (6) y Tierra (7).
En Mesopotamía ya se conocía la escala musical de 7 notas. Y se manejaba un calendario de 7 días. Cuando Dios los dispersó, los seres humanos se llevaron este conocimiento por todas partes.
Lo que es extraordinario es que el arpa y el oboe doble son los instrumentos de música más representativos de Babilonia. Es decir, instrumentos demasiado sofisticados y complejos para que con ellos se iniciara la música en la humanidad.